Alimentación saludable y fármacos: no todas las combinaciones son seguras
Una alimentación equilibrada es esencial para mantener una buena salud cardiovascular. Sin embargo, algunos alimentos o suplementos naturales pueden interferir con el efecto de ciertos medicamentos, alterando su absorción, potencia o incluso generando efectos adversos.
Suplementos naturales: cúrcuma, jengibre y ajo
Estos tres ingredientes, conocidos por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, pueden actuar como coadyuvantes naturales en la prevención de enfermedades cardiovasculares.
No obstante, cuando se consumen en exceso o junto con anticoagulantes (como warfarina o aspirina), aumentan el riesgo de sangrado. Su uso debe ser controlado por un profesional de la salud.
Fármacos antihipertensivos y potasio
Los medicamentos para la presión arterial, especialmente los inhibidores de la ECA (como el enalapril) y los antagonistas de los receptores de angiotensina II (como losartán), pueden elevar los niveles de potasio en sangre.
Por eso, pacientes tratados con estos fármacos deben moderar el consumo de alimentos ricos en potasio, como plátano, patata, brócoli y coles. Un exceso podría causar hiperpotasemia, con riesgo de arritmias y alteraciones musculares.
Antidepresivos tipo IMAO y alimentos fermentados
Los antidepresivos de la familia de los inhibidores de la monoaminooxidasa (IMAO) —hoy en desuso, pero aún utilizados en casos específicos— pueden provocar crisis hipertensivas al combinarse con alimentos ricos en tiramina.
Entre ellos: chocolate, quesos curados, embutidos, carnes procesadas y vino tinto. Estos alimentos deben evitarse estrictamente durante el tratamiento.
Levotiroxina y alimentos
La levotiroxina, usada para tratar el hipotiroidismo, debe tomarse en ayunas y al menos 30-60 minutos antes de las comidas, ya que los alimentos —especialmente los ricos en fibra o calcio— reducen su absorción intestinal y eficacia terapéutica.
En resumen
Un alimento sano puede dejar de serlo al combinarse con ciertos fármacos. Siempre consulta con tu médico o cardiólogo antes de incorporar suplementos naturales o cambiar tu dieta si estás bajo tratamiento farmacológico.
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